FLUCTUATING MERIDIANS (MERIDIANOS FLUCTUANTES)

FEBRERO 22 - MARZO 17

1404 COWART ST, 37408

Las obras de Erika Harrsch, Andrew O’Brien, Pete Hoffecker Mejia y Cog•nate Collective (Amy Sanchez Arteaga and Misael Diaz) exploran las realidades políticas, sociales, y ambientales resultante de la territorialización de America del Norte. A través de la colisión de perspectivas de escala, de lo individuo a lo colectivo, Fluctuating Meridians expone las relaciones, depravaciones, desinformación, y posibilidades generativas que existen en esta región frontera en evolución, sus espacios contiguos, personas, y cosas. Una instalación multimedia, la tercera de la quinta en la Satellite Series de Stove Works, invita a los visitantes a presenciar, participar y hasta colaborar mientras Fluctuating Meridians se devela.

Un meridiano, fundamentalmente, es una línea sobre el superficie de la tierra, visible en escala manejable en los globos terráqueos y mapas. Son líneas continuas viajando entre el norte y el sur, pasando por coordenadas exactas. Estas líneas no se cambian, son inmutables, y entonces proveen puntos fijos que ayudan en la navegación y ubicación. Si uno sabe donde queda allá, pues se puede deducir donde queda aquí.

El cuerpo también tiene líneas inscritos sobre y adentro de ella. Unas son similares a las líneas longitudinales asignadas al superficie de la tierra. Son medios de la comprensión en el sentido de que marcan unidades sumisas de un territorio desconocido. Se vuelven aparentes por los patrones cambiantes del crecimiento del pelo, bajo el escalpelo del cirujana, y codificado en estereotipos morfológicos. Adentro las líneas sigan formas lineales y cuantificables tanto como formas no lineales, o incluso trayectorias extraordinarias. En modos de pensamiento orientales, un meridiano es un camino energético que pasa por el cuerpo y afecta el bienestar en parte o en total. En realidad la función de estas líneas es hacer que el cuerpo exista sin líneas, como una red entrelazada de energías vitales sumándose en un ser físico integro. Tu. y Yo.

Entonces Fluctuating Meridians es una revisión de estas líneas, pensamientos que definen, demarcan y dividen, mezclan e enriquecen. Chattanooga es una maraña de esos caminos de información. Estos cinco artistas exploran las separaciones y conexiones, derribando las presunciones para que podamos volver a salir, y fluctuarnos, desenredando el nudo.

La exposición va a facilitar la investigación de distintas preguntas presentándose en todos lados de los EEUU: Quien es, y quien no es American? Porque se hace esta pregunta, y si debería existir.

Cuales características culturales, ubicaciones geográficas, factores ambientales, historias, políticas, etc componen el individuo? el grupo?

Que es el otro? Que es el fuereño? la persona de dentro? Y, si la asimilación es un requisito para la pertenencia (o para ser incluido).

Cuales umbrales internas, afinidades, borraduras, censuras, e expresiones ocurren en la construcción de una identidad personal? Como se manifiestan estas preguntas y cuales efectos tienen en las conciencias de lxs personxs que no pertenecen dentro lo estrecho-normal? ¿Para mucha gente por los EEUU las fronteras amorfas son un estilo de vida? una mentalidad? una psicología omnipresente?

Las obras de Erika Harrsch traen la política y el pueblo a un espacio compartido de la galería, trasladando de allá hasta aquí un centro de detención ICE para los jóvenes migrantes sin documentos. Su instalación cuestiona la existencia en el imaginación colectiva de los lugares allá, y cuales fuerzas dan forma a nuestras visiones. Muy parecido a las personas, lugares, y cosas que supuestamente den orden, los paredes son abstracciones. Los facsímiles de Harrsch brinden un ambiente que ni es real ni falso, un espacio de transición para ser testigo y estar demorado; en cuerpo, en mente, e en solidaridad.

Las fotos de Andrew O’Brien son aparatos de señalización. Son marcadores, firmas celestiales que identifican la última morada de los que cruzan la frontera sin identidad, superados por las condiciones extremas por el viaje. Con un sextante, una herramienta militar, O’Brien combina perspectivas del paisaje, los que viajan por el, los visitantes de la galería, el artista, y las estrellas.

Peter Hoffecker Mejia diseña construcciones repetitivos, con ritmos y patrones, utilizando formas que cambian cuando sean encontradas. Según Claire Bishop, una historiadora prominente, nunca hay una solo perspectiva. De hecho la perspectiva del arte, y la pintura en particular, fue hecho desde la antigüedad hasta hoy en día encarna las propensiones narrativas de los que tienen poder: el europeo, hombre, jefe. Hoffecker-Mejia desafía los voces laminados de la historia y la colonización. Con contar su propia historia y sus varios experiencias, las historias del origen del art se ponen en cuestión, y la frontera entre lo que conocemos y lo que no conocemos se vuelven mas indeterminado.

Las obras del Cognate Collective se enfocan en la frontera entre México y los EEUU. El equipo de colaboración entre Amy Sanchez and Misael Diaz agita esta línea geopolítica, levantándolo arriba del mapa para explorar la cartografía de lo social.

Artist Bios

The work of Erika Harrsch brings policy and people into the shared space of the gallery, relocating an ICE detention center for undocumented migrant youth from there to here. Her installation questions how do there-places exist in the collective imagination and what forces give form to our imaginings. Much like the real people, places, and things that order, wall, are abstractions. Harrsch’s facsimile proffers an environment that is neither real nor fake, a transitional space to witness and become detained; in body, in mind, and in solidarity.

Andrew O’Brien’s photographs are wayfinding devices. They are markers, celestial signatures that identify the final resting place of unidentified border-crossers overtaken by the extremes of their journey. Using a sextant, a maritime instrument, O’Brien conflates perspectives; that of the landscape, those traveling through it, gallery visitors, the artist, and the stars.

Peter Hoffecker Mejia designs repetitious constructions, cadenced and patternized, utilizing forms that shift as they are encountered. According to Claire Bishop, a prominent art historian, there is never a single perspective. In fact the perspective that art, particularly painting, was produced from antiquity to the present embodied the narrative proclivities of those in power; the European, male, overseer. Hoffecker-Mejia challenges the laminated voice of History and colonization. By Pete’s telling of his story and its mish-mash of experience, the stories of art’s origin are thrown into question and the boundary between what we know and what we don’t become that much more indeterminate.

Cognate Collective’s work fixates on the Mexico, United States border. The collaborative team of Amy Sanchez and Misael Diaz’s Cognates fixation agitates this geopolitical line, lifting it off the map and exploring the cartography of the social.